Las guerras de los hombres no es una novela sobre la guerra, ni siquiera sobre la guerra de Ucrania, aunque está ambientada en ese tiempo y en ese lugar. Esta es una historia sobre los efectos de la guerra en las personas que la padecen, sea combatiendo o tratando de seguir adelante con una vida que nunca puede ser igual, pero que tampoco puede existir pensando únicamente en ella. Los protagonistas podrían ubicarse en cualquier otro conflicto y realmente la historia no cambiaría demasiado porque de lo que habla esta novela es de la familia y de lo que hace humanos a los hombres, más allá (o más acá, nunca se sabe) de la situación geopolítica y de los países en conflicto. A las guerras les ocurre lo contrario que a las personas, cuanto más de cerca se miran menos sentido tienen. Los personajes que viven esta historia luchan por encontrar una razón de ser a sus vidas por encima de la locura en la que viven, por mirar personas en lugar de banderas y por encontrar los motivos por los que, pese a todo, incluso allí, la vida sigue mereciendo la pena.
Casi noventa, de Carlos Mañoso
A sus ochenta y nueve años, Lolo se ha pasado toda la vida metido en el pueblo y enfrascado en su trabajo sin echar nada de menos. Hasta el día en que recibe una mala noticia. Solo entonces se da cuenta de que no ha hecho nada, no ha conocido a nadie y no ha salido de su zona de confort.
El recuerdo de su mujer fallecida lo llevará a Cuba en un viaje en el que tratará de reconciliarse con el pasado, con todas las oportunidades perdidas y todos los deseos que negó.
Un viaje en el que deberá aprender lo que importa y lo que merece su tiempo, justo cuando tiempo es lo último que tiene.