Adriana es una joven española de veintisiete años sedienta de aventuras. Un día decide dejarlo todo y embarcarse en un viaje que la llevará a la ciudad de Osaka, Japón. Allí descubrirá un mundo nuevo, seductor y atrayente, que le revolverá los sentidos. Se dejará envolver por las luces de la ciudad de neón donde transitan los salarymen, enfundados en sus trajes negros, y se maravillará ante el esplendor y los contrastes de una cultura hermética y fascinante. Desde el Palacio Imperial de Kyoto hasta los toris rojos del Fushimi Inari, cada paso será una odisea. En la residencia donde convive con más de noventa inquilinos, provenientes de todos los rincones del mundo, Adriana se enamora. Un joven coreano de ojos rasgados y felinos es quien le arrebatará el corazón. Entonces, todo su mundo se trastoca; Oriente se infiltra por las fisuras de Occidente para quedarse y ya no hay vuelta atrás…